El obispo de Santander, Monseñor Vicente Jiménez Zamora, clausuró la tarde de ayer domingo en la parroquia de San Sebastián de Reinosa, la Visita Pastoral que inició el pasado 10 de abril a las comarcas de Campoo y Valderredible. A la misa solemne asistió un equipo de 25 sacerdotes párrocos y religiosos que atienden a esta extensa zona de la Diócesis.Durante cuatro meses, Jiménez Zamora ha mantenido contacto pastoral con los 11 municipios y los alrededor de 154 pueblos que alberga el Arciprestazgo de Nuestra Señora de Montesclaros, que se extiende por la comarca del sur de Cantabria y cuyo arcipreste es el párroco de Matamorosa, Juan Carlos Fernández Ruiz.
Esta ha sido la segunda Visita Pastoral que, como obispo de Santander, ha efectuado el prelado cántabro. "Ha sido una experiencia gozosa y gratificante", confesó.
Ha destacado que durante estos meses de encuentros ha "comprobado que en esta comarca hay una religiosidad muy arraigada y honda, donde además la gente se siente muy unida en torno a su iglesia".
La visita pastoral ha servido para conocer la realidad del ambiente pastoral y religioso de estos valles, manteniendo así mismo contacto con el mundo social, humano y del trabajo, en unos momentos "delicados para la economía". Visitó las fábricas de Sidenor, Cuétara y de Cementos Alfa, acercándose a estabulaciones ganaderas y agrícolas.
Igualmente visitó en sus casas a numerosos enfermos impedidos, y cambió impresiones con profesores y jóvenes de los centros docentes de la comarca. Asimismo, mantuvo "encuentros cordiales" con las autoridades, alcaldes y presidentes de juntas vecinales.
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